Casi tres años para darnos la razón a las víctimas y al anterior juez instructor
La Audiencia reabre el caso del AVE de Santiago y , tal y como venimos demandando las víctimas y familiares, pide al juez Lago Louro que investigue si Adif evaluó correctamente el riesgo en la curva de Angrois. Aunque no nos deja del todo satisfechos al no admitir todos los recursos, la reapertura de la instrucción supone una nueva oportunidad para que se sepa la verdad y se depuren todas las responsabilidades.
La Audiencia considera que existen indicios de que en la curva «se producía un riesgo de accidente por error humano de tal intensidad que, de haber sido evaluado, habría impuesto su minoración o eliminación».
Señala a su vez que hay indicios de que el método aplicado por el ADIF para gestionar los peligros en ese punto de la línea «presenta carencias» que provocaron que no se tuviera en cuenta la posibilidad de descarrilamiento. De esta manera apunta claramente a los responsables de seguridad del ADIF, y en concreto, al Director de Seguridad en la Circulación, el Sr. Cortabitarte, cuya responsabilidad, entre otras era “La planificación de la organización y los métodos de gestión de la seguridad en la circulación”
La Audiencia subraya que puede haber «responsabilidades criminales de terceros», una vez más señalando al Director de Seguridad en la Circulación, el Sr. Cortabitarte, responsable de la desconexión del sistema de seguridad de control de la velocidad ERTMS en Angrois, sistema que hubiera evitado el accidente. Curiosamente, el Sr. Cortabitarte se negó a declarar en su día. Además, ejerció como perito judicial en la investigación del accidente del metro de Valencia, y está imputado por el accidente de dos mercancías en Arévalo, que causó en el 2010 la muerte de un maquinista por una incorrecta señalización.
La reapertura de la instrucción es un aviso tanto al juez instructor, que ha tenido parada la causa prácticamente un año y medio, como al Fiscal Antonio Roma. Ayer mismo, el Fiscal Superior de Galicia,Fernando Suanzes, señalaba que habrá que volver a valorar el caso Alvia.
Esperamos, como no puede ser de otra manera, que ambos tomen nota de lo dicho por sus superiores y en esta segunda oportunidad hagan las diligencias que correspondan para que se pueda hacer justicia en un accidente que recordemos dejó 81 muertos y más de 140 heridos.
Por otro lado, este auto, pone de manifiesto una vez más las posibles responsabilidades políticas que puedan existir en esta tragedia. Como ya indicó el juez anterior Luis Alaéz en un auto, las empresas públicas de Renfe y Adif antepusieron los intereses económicos y comerciales por encima de la seguridad de los viajeros. Quizás la presión de algunos políticos movidos por otros intereses influyeron en la puesta en marcha de la vía y del tren, sin que reunieran las adecuadas condiciones de seguridad.
Las víctimas queremos saber si esto tiene que ver con el hecho de adelantar la inauguración de la línea por parte del exministro socialista José Blanco, así como la puesta en servicio del tren por parte de la ministra en funciones Ana Pastor.
Una justicia sin una investigación adecuada no es justa ni democrática.